Septiembre es siempre un mes de transición. El inicio del otoño se hace notar en impredecibles cambios de tiempo y por supuesto en un sol más suave. Los ponientes, o vientos del Oeste, empiezan a soplar irracionalmente y los surfers aprovechan y se preparan para disfrutar las playas menos frecuentadas y sus vientos más potentes. Escribo este texto sentada en el restaurante de El Club Náutico de El Arenal, una zona de veraneo muy turística que otrora fue otra de las joyas de la isla. No obstante, justo donde se ubica el Club Naútico se marca el inicio de un secreto bien guardado de la zona: Son Verí. Parte de la municipalidad de Llucmajor, Son Verí es una zona de veraneo muy tranquila con preciosas villas tradicionales de estilo mallorquín, entre las que destacan aquellas construidas en primera línea de mar. La costa de la zona guarda también sus secretos con cuevas y playitas de tamaño medio, que constituyen el escenario perfecto donde refrescarse y relajarse en los calurosos veranos. Esta zona fue -y de alguna manera todavía es- el paraíso turístico de las vacaciones de la clase alta mallorquina en los años 70. A diferencia de otras zonas de veraneo más lujosas como Andratx, la gran ventaja de Son Verí es que se ubica tan solo a 15 minutos de Palma, conservando aún su belleza natural sin decoro y sus limpias y tranquilas aguas. Además, su cercanía a Palma facilita que se pueda vivir en esta zona tanto en verano como durante todo el año. Si pudiéramos dibujar una línea imaginaria para saber dónde comprar una propiedad en esta zona, ésta se iniciaría en Son Verí y continuaría por Cala Blava. En Son Verí, tenemos en cartera una propiedad inolvidable:
http://uniquevillasmallorca.es/propiedad/villa-mediterranea-venta-son-veri-llucmajor-mallorca/
Esta imponente casa de verano tiene preciosas visas a Palma y a la bahía de Palma y se ubica a tan solo 100 mts de una pequeña playa. Además, los propietarios disfrutan de salidas en barco frecuentes ya que la propiedad cuenta con amarre propio en el Club Naútico. Me veo obligada a dejar de escribir: ha llegado mi plato-llampuga con pimientos. Este tipo de pescado aparece por aguas mediterráneas solo cuando los días veraniegos empiezan a debilitarse y cuando el mar muestra su carácter y las olas ganan fuerza. Así, se considera a la llampuga como un plato típicamente del mes de septiembre. El nombre de este pez se deriva de “llamp” que se refiere a los destellos de luz que el animal emite bajo el agua. Se puede cocinar de muchas maneras, la más tradicional de las cuales es la que me han servido: Llampuga con pimientos: se fríe el pescado en trozos y utilizando el mismo aceite, se fríen el ajo y el pimiento rojo. Todo ello se sirve junto con el pescado y finalmente el plato se riega con el aceite frito. Hay más maneras creativas de saborear la Llampuga, como se demuestra cada año en diferentes muestras. De la “Semana de la Llampuga” organizada en el Hotel Cap Vermell destacan sus croquetas de llampuga, ceviche y tártar de llampuga o incluso los canelones de llampuga! Toma nota! es indispensable probar este plato el año que viene!!